Mi paso por Unidos.

Inicie mi camino por Unidos en el campamento de verano del 2009 como voluntario, en ese tiempo pasaba por mucho problemas con la sociedad que me rodeaba por problemas de actitud y carácter, antes de pertenecer a unidos  era parte de la Asociación Scout de México A. C. donde también me desempeñaba como voluntario cuidando niños scouts y realizando actividades para ellos, tuve que salirme de esta asociación a causa de problemas con mis superiores y se me presenta la oportunidad de entrar a unidos en ese mismo año, me presente en el Parque España a tomar mi capacitación para poder ser parte del campamento de verano, me dieron a elegir entre varios grupos de diferentes discapacidades entre esos grupos se encontraba el grupo café de sillas de ruedas a la cual muy pocos voluntarios entraban, en ese campamento conocí a uno de mis primeros amigos en unidos Armando Martínez, uno de los 4 hermanos con la misma discapacidad física, al compartir ese campamento con el aprendí muchas cosas como los es ser paciente, a tener empatía con las demás personas y valorar lo poco o mucho que tuviera, porque si para el no existía un limitante para poderse divertir para mi tampoco debería de existir algo que me lo impidiera divertirme, algo que sigo compartiendo con cada voluntario que conozco en cada programa de unidos es que no hay mayor agradecimiento de un amigo que una sonrisa o el agradecimiento de una madre al entregarle a su hijo con una sonrisa en su cara y que traten de dejar un pedazo de ellos para que sean recordados por ellos, algo que me hace muy feliz es saber que cada vez que ve a mis amigos pregunta por mi y cuando se me presenta la oportunidad lo voy a saludar y no deja de decir mi nombre.

En este año participe de otra manera en unidos, acepte el reto de ser un Orientador y que mejor del grupo que me vio crecer el café,  para mi el haber estado en este campamento como orientador me ayudo a conocer un poco mas de las discapacidades que existen y como relacionarme con cada una de ellas, estaba más relacionado con la discapacidad física pero en este campamento pude convivir con amigos de otras discapacidades como la sordera, Síndrome Down, autismo y discapacidad física.

Estuve a cargo de 18 amigos con discapacidad y 25 amigos voluntarios, con ellos compartí mi primer campamento como orientador en el cual realizamos diversas actividades como el tener un día laboral en una Lavandería e ir a convivir a un asilo de ansíanos.

Logre ganarme la confianza de mis amigos con discapacidad y ganarme su cariño, un recuerdo de los muchos que tengo de este campamentos es que me gustaba mucho que me dijera unos de mis amigos con discapacidad que no había nadie que lo quisiera más que yo.

Tito González